Librerías y editoriales independientes, borradas del panorama económico

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Librerías y editoriales independientes, borradas del panorama económico

Por: Susana Rodríguez. Foto: Especial. Fecha: 16 de octubre, 2023

Las editoriales y librerías independientes de Jalisco y todo México, están atravesando una crisis larga. Esta situación se deriva principalmente, de la ausencia de políticas públicas enfocadas a protegerlas.

En una revisión a detalle de la lista de comercio al por menor de libros, del Directorio Estadístico de Unidades Económicas (DENUE) del INEGI, deja ver que en Jalisco hay 150 unidades entre las que están librerías universitarias, de corporativos editoriales, religiosas o de libros usados, pero no las autogestivas e independientes.

En entrevista con Carlos Armenta, director de Impronta Casa Editora, secretario del Gremio de Editores de Guadalajara y presidente del comité de Editoriales Independientes dentro de la Cámara Nacional de la Industria Editorial (CANIEM), habló de cómo han estado transitando tras la pandemia, en el mundo editorial independiente.

Para empezar es importante situar qué es una editorial o librería independiente y sobre ello, Armenta explica: “El sector independiente se distingue, la mayoría de las veces, por cierta militancia y postura política frente a los grandes grupos o las cadenas de librerías.»

A esa importante puntualización, se suma que las librerías independientes no están contabilizadas oficialmente como unidades económicas y por tanto viven un rezago o tienen menor importancia, la pregunta es, ¿Querrían estarlo?

Cuáles y cuántas…

Aunque pareciera no existir una definición para la edición independiente, Carlos Armenta traza algunos caminos que podrían bosquejarla.

Desde su experiencia reconoce que en Guadalajara, cuando mucho, existen alrededor de diez librerías: Lopa, Libertina, Elegante Vagancia, Mar de Tinta, Artlecta e Impronta, entre ellas.

Esto contrasta con que según información de Gobierno del Estado, Jalisco, está entre los siete primeros lugares donde hay industrias creativas, pero fuera de Guadalajara las posibles editoriales y librerías independientes en los municipios no metropolitanos, “no existen”.

De acuerdo al DENUE en este año hay en Jalisco 4 mil 756 industrias culutrales, 332 más que en el 2018.

“Para entrar en diálogo con el mundo del libro, debemos tener nuestra mirada en CdMx y hacer llegar allá nuestros libros. Eso ocasiona un gasto adicional para los que estamos en el interior. Una pregunta importante ronda al sector independiente ¿quién de nosotros tiene pleno uso de sus derechos laborales? Una jubilación, un salario digno, seguridad social son cosas que se ven lejanas para nosotros”

Carlos Armenta, editor.

Esta misma lejanía aplica de 124 municipios hacia Guadalajara, donde solo hay una biblioteca por 4 mil habitantes, o una cafetería-librería que, además, es escaparate de los corporativos de best sellers, no de producción local.

Sin datos, no hay políticas

En Jalisco, del 2018 al 2023, las industrias creativas vinculadas con el tema de los libros disminuyeron en 7.5 por ciento, de acuerdo a información del DENUE del INEGI.

El registro oficial del INEGI divide los emprendimientos relacionados con libros en: comercio al por mayor, comercio al por menor, editoriales y editoriales que imprimen.

Las unidades económicas editoriales oficiales pasaron de ser 201 en 2018 a 186 en 2023.

Sin embargo, al igual que en otros temas de la sociedad y la cultura, el mundo editorial tampoco está reflejando al cien por ciento en las cifras oficiales.

Esto debido a que muchas de las librerías independientes no están contabilizadas por estos registros, lo que hace complicado tener una idea certera de su condición.

Esta realidad fue corroborada al momento en que Perimetral buscó a Impronta Casa Editora en el registro oficial y no está.

Derechos Culturales vs propiedad intelectual

Otra complejidad que atraviesa a las librerías y editoriales independientes, es la persecución legal con tintes políticos, por reforzar el goce del derecho a la cultura, la información y la libertad de expresión al margen de los derechos de propiedad intelectual.

A propósito de los plagios que parecen estar “a la orden del día” entre la clase política en busca de gobernar el país y las cortes, al preguntarle a Carlos Armenta su opinión sobre ello, trajo dos reflexiones.

Para el editor independiente los casos recientes de plagio dentro del ámbito de la política evidencian por parte de quien plagia una “intención de cometer fraude”, apunta.

“En ese sentido, debe haber mecanismos de justicia para la rendición de cuentas, sin duda alguna”.

Sin embargo, en un análisis aún más amplio y profundo sobre los derechos culturales, Armenta planteÓ la necesidad de encontrar un balance entre la propiedad intelectual y el derecho al conocimiento, un ejercicio por el que varios editores han abogado hasta poner en peligro sus formas de sostenimiento.

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 “Para algunos de nosotros debe ser una obligación garantizar los derechos culturales, más allá de la perspectiva restrictiva que se tiene sobre el tema. Al mismo tiempo, debemos respetar el trabajo de autores y garantizar, también, un pago digno por su trabajo”.

Carlos Armenta, editor en Impronta

Capital Mundial del Libro ¿Y los beneficios?

De abril de 2022 a 2023 Guadalajara recibió el nombramiento de Capital Mundial del Libro por parte de la UNESCO.

Después de 100 millones de pesos invertidos, 2 mil 600 eventos y algunas obras de infraestructura realizadas durante este período, al gremio editorial independiente le “heredaron” dos proyectos.

Uno de ellos fue la realización del <<El Salón del Libro Independiente>>, un espacio de convergencia para editoriales y librerías. De acuerdo a información publicada en medios locales, la primera edición de este encuentro se realizó en el 2019, en la CDMX.

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Y a partir de la realización de esta segunda edición en Guadalajara, se estableció el compromiso de hacerla de nuevo en 2024.

El segundo proyecto fue el <<Fomento Editorial>>, un recurso destinado para que editoriales independientes locales obtengan recursos para concretar publicaciones. En el 2022 se invirtió un millón de pesos para beneficio de 15 editoriales.

Recién se entregaron los recursos y serán beneficiadas 14 editoriales con hasta cien mil pesos para cada una, a fondo perdido.

“De este último (Fomento Editorial), estamos en espera que quede como un acuerdo del Cabildo, para que se garantice su permanencia, sin importar los cambios de gobierno. De ahí en fuera, hablando a título personal, la programación (de la Capital Mundial del Libro) fue decepcionante. Es momento de reconocer las aptitudes profesionales del ecosistema editorial de nuestra ciudad”, comentó.

“Nunca terminamos de estar listos para la FIL”

De cara a la Feria Internacional del Libro 2023 que se realizará del 25 de noviembre al 3 de diciembre, este año están especialmente contentos porque se hará el Encuentro de Editoriales Independientes.

La organización de esta actividad la están realizando desde el Comité de Editoriales Independientes junto con el área de Profesionales de la FIL.

 “Es un logro importante, en busca de crear un equilibrio en el ecosistema editorial que se encuentra controlado por los grandes grupos editoriales”, dijo el editor independiente.

Perfil del lector

Del 2016 al 2023, el número de personas “lectoras”, de más de 18 años de edad disminuyó de 80.8 por ciento a 68.5 por ciento, sin que se haya registrado un repunte en los años de confinamiento con motivo de la pandemia, de acuerdo al Módulo de Lectura (MOLEC) del INEGI.

Según esta estadística, en 2023 el perfil de las personas que más leen en México, es: un hombre, entre 18 y 24 años de edad, que prefiere la lectura digital (páginas de internet, foros, blogs) y después libros que en su mayoría consigue de manera gratuita.

Este joven puede dedicar hasta 42 minutos seguidos sólo a leer, a una velocidad regular, alcanzando a leer en promedio 3.4 libros al año.

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El MOLEC reflejó que entre más avanza la edad las personas leen menos.

Entre quienes tienen de 18 a 24 años de edad y las personas mayores de 65 años de edad, la diferencia en el nivel de lectura, fue de 17 puntos porcentuales.

En la preferencia general los libros acapararon el primer lugar, seguidos de las páginas de internet, foros y blogs a diferencia de la población joven que prefiere los medios digitales.

Aunque el confinamiento por la pandemia no impactó en el incremento del hábito lector, sí tuvo incidencia en el formato que prefieren las personas; en 2020 el porcentaje de personas que leían en digital era de 12.3 por ciento y para el año siguiente fue de 21.5 por ciento.

Si te da curiosidad el Encuentro de editores independientes, busca la información en FIL 2023.

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Periodista que recién incursiona en publicaciones independientes y en organizaciones civiles. Escribo gozosa para Perimetral.

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