No queremos darnos cuenta que vamos al suicidio colectivo: Defensoras de Jalisco
Por: Cristina Campos. Foto: Jade Ramírez. Fecha: 11 marzo, 2024
En los campos de Jalisco resonó el 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras.
La Red de Defensoras Jalisco -grupo organizado por mujeres de las seis regiones de la zona sur/sureste de Jalisco que se dedica a luchar por el derecho a la salud y un ambiente sano, libre de pesticidas y agrotóxicos- fijó su postura en una rueda de prensa.
Realizaron una mesa de diálogo donde se encontraban campesinas de Ciudad Guzmán, Atoyac, Tala, Hostotipaquillo, El Salto y Juanacatlán; cada una expuso las razones principales de la Red de Defensoras Jalisco y su lucha:
“ …esta red de defensoras nació en el 2015, después de una serie de encuentros entre mujeres de distintos municipios y regiones del estado, acordamos de manera colectiva un punto de encuentro entre las lucha que como mujeres mantenemos por el bien de nuestro cuerpo, de nuestras familias, de los territorios; invitamos a las personas a conscientizarse sobre esta urgente integridad y protección de los cuerpos de las mujeres y los seres vivos con quienes compartimos los ecosistemas.”
Patricia Karenina, vocera de la RDJ
Explicó cómo el desequilibrio en nuestro ecosistema y sus ciclos tiene impactos reales e impredecibles, no sólo en la tierra, el agua y el aire, sino también en los cuerpos de las mujeres y en general, de todos los seres vivos.
El aire es nuestro
El elemento aire, representado por Angélica Ramos y Lidia Matías, originarias de Santa Cruz de las Flores, dio inicio a su discurso para después comenzar a leer lo que parece un manifiesto con voz de reclamo:
“A la opinión pública. Somos cuerpos de mujeres, somo agua, aire, tierra, y vida silvestre del Valle de Xochitlán Santa Cruz, que se nos despoja por los incendios, agroquímicos, agotamiento de nuestra agua, por extracción industrial y expansión de vivienda comercial y su descarga en arroyos Los Guayabos; El Arenal y el humedal La playa Santa Cruz; por vialidades y transporte mortífero del imperio mercantil destinando a nuestro valle a ser un sacrificio.
¿A quién le pertenece el aire, agua y tierra? ¿A quién le pertenece la vida geológica y silvestre que nos precedió desde hace más de 95 mil años?, preguntaron.
Lidia, explicaba sosteniendo papeles, cómo las diferentes empresas agroquímicas y de otras índoles dañan sin medida no solo la tierra, las plantas, árboles y animales, sino también a los arroyos, lagos y mantos acuíferos y por consecuente, a las mismas personas.
Está causando daños a las salud como fallas renales, infartos, daño hepático, fibrosis pulmonar, demencia y depresión, así como malformaciones congénitas, falta de concentración, alergias y enfermedades en la piel.
Responsables con nombre y apellido
El manifiesto expuso también en forma de listado, una serie de empresas tales como Fefermex, Cemex, Perfumetal y Servicios SACI (Sistemas Automáticos Contra Incendios), como responsables por los incendios del pasado abril del 2023.
También se responsabilizó a los corredores industriales, que radican sin los permisos y supervisión necesarias, a las granjas avícolas y equinas, así como a las inmobiliarias comerciales Vistas Sub Senderos de Monteverde, por vender viviendas sin estructura, ni servicios públicos.
Se le han puesto “altos” reiterados a las empresas que bajo el cobijo de impunidad de un sello como empresa socialmente responsable, trabajen con productos altamente tóxicos, a las empresas inmobiliarias, que entre todos los daños, el desemboque a mantos acuíferos, ríos y arroyos es el más alarmante, y que de la misma manera, consideran una intrusión en las carreteras y espacios, el pase desmedido de camiones de carga pesada, poniendo en riesgo la vida de las personas y la fauna del lugar.
Exigimos respeto irrestricto a nuestros cuerpos y vidas y de los seres vivos no humanos con quienes compartimos el aire, el agua y la tierra
Angélica Ramos – Comité Agua y Vida
Abejas, en el daño piramidal
Araceli Paniagua, proveniente de Atoyac y apicultora en su municipio, explicó, lo alarmante que le parece la situación de la deforestación desmedida y la instalación de agroindustrias que provoca las abejas se alejen por eliminación de plantas nativas, arroyos y lagos, privando de alimento y bebida a los polinizadores melíferos.
También mencionó la filtración de agroquímicos tóxicos desde los sembradíos de aguacate hasta los mantos acuíferos que abastecen a la población, siendo parte de una cadena piramidal de daños.
Doña Coco, originaria de Cuyacapan, municipio de Atoyac, tambiénhabló sobre la molestia que sentía al ver morir el “Tanque del agua azul”, un nacimiento de agua que, según cuenta, era el punto de reunión en las vacaciones de Semana Santa de su infancia.
Manifiestó con tristeza y nostalgia que el nacimiento está muriendo, porque su laguna se está secando.
Fue nuestra alberca, nuestro lugar, nosotros ahorita estamos muy preocupados, como decía la señora Cheli, por los sembradios de agave, por los sembradios de las aguacateras, los pozos profundos, que desafortunadamente están con las personas pudientes, porque para una persona que no puede, no puede tener un pozo, ojala que terminara esa política de muerte.
Doña Coco – Atoyac, Jalisco
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Explotar seres vivos
Eva Villanueva es originaria de Ciudad Guzmán y una gran conocedora de nuestra relación con los animales y plantas medicinales.
Ella se enfocó en hablar sobre una extinción silenciosa: la de los hongos y plantas silvestres medicinales de “un gran potencial y que fueron heredadas por nuestras culturas”, apuntó.
Fue importante señalar la ignorancia de las instituciones y funcionarios públicos ante los alarmantes cambios en nuestro territorios como resultado de la contaminación, tala y otras prácticas desmedidas.
Así está todo el sur de Jalisco, no es necesario ni siquiera traer fotos. Ese gigante agroalimentario ¿A beneficio de quién? ¿Qué nos está quedando en Ciudad Guzmán?: un lago precioso que se está sedimentando, tiene muchísimo sedimento por todo lo que arrastra de los cerros aledaños, gran contaminación también por metales pesados de lo que tiran los invernaderos de alrededor, un saneamiento sanitario, que lixiviados corren y contaminan también, una población que está creciendo y que está destruyendo las áreas que antes nos daban aire; un predio en proceso de ser Área Natural Protegida ahora están las casas de los políticos o de los pudientes. No queremos darnos cuenta que vamos al suicidio colectivo.
Eva Villanueva – Ciudad Guzmán, Jalisco
A través de un discurso imponente, Eva, destacó la importancia que radica en defender la vida desde una relación respetuosa con la naturaleza.
A las plantas hay que escucharlas, hay que buscar esos espacios tan hermosos, yo trabajo en la farmacia viviente y digo: cada que pongo una farmacia viviente es un parche a la tierra, le estamos poniendo un parchesito a ese vestido tan deteriorado y desgarrado por los seres humanos que tiene la tierra, y entre más parches de colores, aromas, sabores, tenga la tierra, mucho mejor.
Eva Villanueva – Ciudad Guzmán, Jalisco
Terminó haciendo un llamado urgente a la sociedad a actuar a la par del pensar, a cuestionar los altos puestos y exigir un alto a la cultura de la muerte y cambiar la perspectiva a una “Política de esperanza”.
No queremos darnos cuenta que vamos al suicidio colectivo: Defensoras de Jalisco
Quien tomó la voz al final representando al elemento agua fue Sofía Atahualpa proveniente de El Salto.
Hoy, el agua, esa composición perfecta entre hidrógeno y oxígeno , es sinónimo de líquido, no significa que tenga la mezcla para dar la vida, esta agua dadora de vida, se convierte en una herramienta de dominación para quien no puede pagarla, el agua de calidad es para la zona industrial que requiere inocuidad para la producción, en cambio para quienes habitamos el territorio, es agua cargada de arsénico por sobreexplotación de los mantos acuíferos, de coliformes fecales por la infiltración en los cuerpos de agua, cargados de contaminantes, el agua casi extinta es suplantada por una carga de metales pesados, bacterias, contaminantes diluidos en ella, nuestro territorio es una zona de sacrificio, un paraíso industrial,un infierno ambiental, vivimos en un estado de sobrevivencia, despertamos en la madrugada para llenar los tambos que nos ayuden a tener agua durante algunos días, sino es que nos despertó antes el mal olor…
Al finalizar este medio preguntó a manera de reiteración:
–¿Cómo explicarían a las juventudes que el 8M no es solo sobre los cuerpos de las niñas y mujeres adultas sino por la libertad de los territorios?
–Sin naturaleza no hay cuerpos que puedan exigir; la tierra es una mujer, es nuestra madre tierra que se alimenta del aire, se alimenta del agua y del fuego, concluyó Araceli.
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Cristina Campos
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