La autora en esta ocasión dedica un potaje de sarcasmo.
Se centra en la decisión que tomaron legisladores de no quitar el impuesto especial a los artículos de primera necesidad que se usan en la menstruación, porque se considera que primero está salvar las finanzas del gobierno federal y «los pobres», que quitarle la errónea etiqueta de artículo de belleza o privilegio a las toallas que mensualmente usamos las mujeres por necesidad.
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Esta columna se publicó originalmente en Pie de Página.
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Periodista multimedia y escritora. Ex reportera en la iniciativa México Leaks. Becaria de la IWMF, Cosecha Roja, News Corp.
[…] Pensé que nunca iba a llegar el día en el que la devoción hacia un caudillo eliminara en su totalidad la capacidad en los seres humanos llamada sentido del humor, pero al parecer esto ha sucedido con algunos obradoristas que asumieron con literalidad las palabras vaciadas en la anterior Igualada, titulada “El gran patriarca no menstrúa”. […]